Lo ocurrido en el PTO US Open 2023 quedará grabado en la retina de los aficionados al triatlón creo que para siempre.
Y no es por el recital que dió el ya-casi-retirado Jan Frodeno sino por cómo se la victoria se le escurrió entre los dedos al número 1 del ránking: Kristian Blummenfelt.
Sin embargo no he venido a entrar en el salseo o la crítica. En este pequeño artículo te explicaré:
- Qué le pasó realmente al “Toro” (sinceramente, creo que a veces se les va un poco la pinza con los motes a esta gente).
- Qué puedes aprender de ello (aunque la distancia entre su rendimiento y el tuyo se mida en años luz)
- Qué deberías tener en cuenta a la hora de entrenar (aunque luego no vayas a hacerme caso).
No es la primera vez que vemos al noruego pasar penurias con el tema de los calambres pero lo cierto es que esta vez el foco estaba muy puesto en él y Frodo.
Por este motivo creo que las imágenes donde se le ve parado y estirando en mitad de carrera se han hecho virales (en el mundillo).
Pulsa sobre el vídeo de abajo si aun no lo has visto.
Con toda honestidad, aunque yo mismo practico triatlón, no soy muy aficionado a ver las competiciones.
Yo soy el típico que busca al día siguiente: “highlights ITU de nosedonde” o “Ironman World Championship recap”.
Prefiero ver si ha habido algo interesante antes de comerme la retransmisión completa de un triatlón de 8 horas y lo que cuelgue.
Sin embargo en esta ocasión tenía ya la mosca detrás de la oreja.
Esta gente de PTO creo que van encontrando el punto de vender una buena carrera.
Lo digo por cómo la calentaron antes de que empezase con lo de “el chaval que grita: que viene el lobo” y todo eso.
Y claro, cuando al día siguiente veo las imagenes… digo: No puede ser.
Después de volver a sentarme en la silla, me hago la siguiente pregunta: ¿Cómo es posible, con la brasa que están dando con lo de Santara Tech, que este triatleta, más máquina que humano, tenga problemas con esto?
Si esta gente me está vendiendo que prestan atención hasta el más mínimo detalle. Que parece que estudian hasta si el pelo de las pestañas es “aero” o no.
Aquí hay algo que no cuadra.
Acto seguido voy a ver las declaraciones y allí veo que “Big Blu” (venga va, reconozco que este mote si me gusta) está contando que el problema no es la carrera a pie sino el ciclismo.
En pocas palabras dice de que no ha podido entrenar lo suficiente sobre la cabra.
Y ahora es cuando vuelco la mesa y digo “aquí os quedáis cabr**es”
Entiéndeme.
Esto no es el triatlón popular de Arroyo de los Gorrinos.
Esto es una competición profesional donde el primer clasificado de la carrera se lleva la minucia de 100.000 pavos más un bonus de otros 100 según la posición final en el ranking cuando termina la temporada.
¿Y esta gente va allí sin entrenar lo suficiente? ¿Les sobra el dinero o qué pasa aquí?
Vale, ok, el segundo se lleva 50k. Que ni tan mal.
Pero es que no se trata ni de eso, sino de que encima van vacilando de que van a ganar la carrera.
Por no hablar de toda la retahíla de patrocinadores
¿Es que nadie piensa en ellos?
Pobrecicos, si los triatletas a quienes patrocinan no ganan carreras, ¿cómo van a demostrar que su nueva bici es un 7,3% más aerodinámica, un 3,52% más ligera, un 4,283% más rígida (y un 153% más cara) y que gracias a esto vas a poder ganar 13,2 segundos en el parcial ciclista de un Ironman si vas a 45km/h, la cual es tu velocidad habitual?
Que cunda el pánico porque hay más.
Un poco más adelante en la entrevista se entrevé otro problema: sólo en agosto va a competir también en el test event de París 2024, en el PTO Asia Open y en campeonato del mundo 70.3 en Finlandia.
Un calendario más apretado que las tuercas de un submarino.
Pero es que de nuevo el problema no es el propio calendario sino la diferencia de formatos.
El test event de París es en formato olímpico, es decir, con drafting y bici de ruta mientras que el resto son sin drafting y con bici de crono.
En la entrevista el noruego habla de encontrar un equilibrio entrenando con ambas bicicletas.
Quizá le respalde la experiencia de ser campeón olímpico y del mundo en corta distancia, además de en media y larga.
Y sinceramente, pienso que Blummenfelt podría haber ganado la carrera si no hubiese tenido éstos problemas.
Pero parece ser que uno no puede vivir sólo del pasado en un mundo donde se tiende a la hiperespecialización.
¿Qué puede aprenderse de todo esto?
En mi opinión pueden aprenderse varias cosas:
En primer lugar, como verás a continuación y por lo que saqué de la entrevista he enfocado la reflexión en el ámbito de la preparación.
Pero… también podría ser que hubiese planteado mal el plan de carrera.
No es descabellado.
Pensemos que el tipo se pone primero en el parcial de ciclismo y cuando lo cogen por detrás el se mantiene en el grupo de cabeza (respetando la distancia of course). Podría ser que no esperase que lo pillaran y se esforzase más de lo previsto, lo cual es una de las causas principales de los calambres.
Un mal plan de carrera siempre es mejor que ir sin plan. Cuanto más te desvies de lo planificado, mayor probabilidad de fracaso.
En segundo lugar, y como ya dije, es una mala idea ir a cualquier tipo de competición sin prepararla adecuadamente. Seguramente los superhombres del norte puedan ir y triunfar pero esto raramente aplica a los atletas populares.
Lo de “me apunto a esta carrera y ya veré cómo la preparo” o “he conseguido un dorsal para esta carrera, quedan dos meses, pero creo que me da tiempo” no suele terminar bien.
Debes ser muy selectivo cuando organices un calendario. Sigue un plan y cíñete a él.
En tercer lugar y muy en relación con el primero, es escoger adecuadamente el calendario de competición. ¿Quién no conoce al típico que se apunta a todo lo que tenga que ver con nadar, ciclismo, correr? Travesías, carreras populares, triatlón cross, maratón, gran fondo de carretera, etc. ¿Ya sabes cómo acaba no? Aprendiz de todo y maestro de nada, lo cual está bien para pasar un buen rato y divertirte pero no tanto si realmente quieres ser competitivo en algo.
Si lo que quieres es conseguir el máximo rendimiento en una disciplina o formato de competición va a tocar emplearte a fondo en dicha especialidad. ¿Es aburrido y monótono? Si. ¿Vas a tener más probabilidades de éxito? También.
Si quieres saber más sobre este aspecto del entrenamiento, hice una trilogía de vídeos sobre el tema del entrenamiento cruzado, ya sabes, realizar deportes que complementen el que ya practico.
La cosa no funcionó porque creo que la gente se confundió.
En el primer vídeo di las razones por las que yo creía que era una mala idea realizar entrenamiento cruzado:
En el segundo hice justo lo contrario, dar razones para hacerlo:
Y aquí fué cuando muchos se perdieron. No entendieron que pretendía mostrar que no todo es blanco o negro y que como todo en la vida, depende.
Así que hice un tercer vídeo donde expliqué que, en realidad ambos vídeos no se contradecían:
Y si no te apetece ver la serie de vídeos aquí te dejo las ideas principales:
- Si tu objetivo es socializar, pasarlo bien, cuidar tu estética, etc. entonces nada de lo que diga puede aplicarse. Si esos son tus objetivos puedes hacer lo que te de la gana. Yo suelo hablar de buscar rendimiento.
- Practicar una disciplina diferente a la tuya siempre va a resultar en un entrenamiento menos eficaz o directamente que interfiera en las adaptaciones deseadas.
- Una excepción sería el entrenamiento de fuerza, aunque no todo vale. También he subido varios vídeos sobre el tema hablando de ello.
- La otra excepción sería cuando por el motivo que sea no puedes practicar tu deporte, en ese caso deberías buscar la modalidad que más se le asemeje para poder seguir entrenando.
Fuera de esto no se me ocurren otros motivos por el que debas entrenar diferentes disciplinas o preparar pruebas muy diferentes.
Bueno si.
Si tienes la oportunidad de llevarte a casa 100.000 dólares, pues oye, quizá merezca la pena el riesgo.
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